¿Qué es el snowboarding?
El snowboarding es el acto de hacer snowboard, un deporte de invierno que se realiza sobre una tabla especialmente diseñada para deslizarse en la nieve. Esta actividad, combina elementos del esquí, el surf y el skateboarding.
Permite a los riders deslizarse sobre pendientes nevadas mientras están sujetos a la tabla por medio de fijaciones especiales. Por supuesto, es el mejor deporte del mundo que existe hoy en día 🙂
Orígenes del snowboard
El concepto moderno del snowboarding comenzó a tomar forma en la década de 1960. Sherman Poppen, un ingeniero de Muskegon (Michigan), creó un prototipo primitivo de snowboard en 1965: al juntar dos esquíes y usar una cuerda como dirección. Este diseño, se popularizó rápidamente y dio lugar a la primera producción comercial de snowboards.
A lo largo de las décadas siguientes, pioneros como Tom Sims y Jake Burton Carpenter perfeccionaron el diseño y la funcionalidad de las tablas. Llevando así el snowboard a un público más amplio y diverso, a lo largo de todo el planeta. La historia del snowboard había empezado.
El snowboarding fue reconocido como disciplina olímpica en 1998, durante los Juegos Olímpicos de invierno en Nagano (Japón). Desde entonces, ha sido un habitual en los Juegos Olímpicos de Invierno; atrayendo a cada vez más competidores y espectadores.
Existen diversas modalidades de snowboarding, cada una con sus características y reglas específicas:
- Estilo libre (Freestyle): Enfocado en la realización de todo tipo de trucos posibles. Incluye competencias como el slopestyle y el half pipe (tubo de nieve), donde los riders ejecutan saltos y acrobacias aéreas en estructuras especialmente diseñadas para tal fin.
- Big Air: Consiste en un solo salto gigante desde una rampa, donde los competidores intentan alcanzar el salto más alto posible y ejecutar la mejor acrobacia en el aire, antes de aterrizar. Se juzga la dificultad y ejecución de sus movimientos.
- Snowboard Cross (Boardercross): Carreras en grupo por un circuito con obstáculos variados, donde la velocidad y la habilidad para maniobrar son claves para ganar.
- Alpino / Eslalon: Incluye carreras contra reloj en recorridos que requieren habilidades técnicas precisas, para deslizarse a través de puertas y alrededor de banderas. Hay que conseguir los mejores tiempos. Se necesitan fijaciones muy duras, para un control preciso a alta velocidad.
- Freeride: Se practica fuera de las pistas de la estación de esquí. Con tabla, fijación y bota dura. Es el más desafiante para los riders, al ser a través de terreno natural y no modificado.
- Jibbing: Similar al skateboarding. Esta modalidad implica maniobrar sobre estructuras como barandillas y cajones. También otros objetos urbanos o de parque. Los riders utilizan tablas y fijaciones con un buen flex (poca dureza). Y una bota blanda acorde, para mayor maniobrabilidad.
- Quarterpipe: Se realiza en un cuarto de tubo; una estructura similar a un medio tubo, pero que termina en una rampa vertical. Los snowboarders intentan alcanzar la máxima altura y realizar trucos antes de volver a descender.
- Snowboard de montaña o travesía: En esta modalidad, se utilizan tipos de tablas especiales, llamadas «splitboards». Pueden dividirse en 2 partes para ascender montañas como si fueran esquís de travesía. Es perfecto para explorar zonas alejadas fuera de pista. Aunque requiere un conocimiento avanzado del terreno y las condiciones, para minimizar el riesgo de lesiones.
Practicar snowboard no solo es un deporte de alta intensidad y habilidad, sino también un estilo de vida: como expresión personal y creativa en la montaña. Con una rica historia y una comunidad vibrante, continúa evolucionando y atrayendo a nuevos amantes cada año.